Sandra Gonzalez's Obituary
Dr. Sandra Nohemi Gonzalez Delgado Muñiz
[February 21, 1969] – [November 22, 2025]
Beloved Mother, Educator, OBGYN, and Faithful Servant
It is with profound love and deep sorrow that we announce the passing of Dr. Sandra Nohemi Gonzalez Delgado Muñiz, who departed this life on Saturday, November 22, 2025, at the age of 56. A devoted mother, compassionate physician, and unwavering woman of faith, she leaves behind a legacy of wisdom, service, and unconditional love.
Born on February 21, 1969, in Monterrey, Nuevo Leon, Mexico. Sandra was a lifelong student whose thirst for knowledge was matched only by her desire to share it. She pursued her passion for medicine with profound dedication, earning her medical degree in Obstetrics and Gynecology from the Universidad Autonoma de Nuevo Leon from 1987 to 1996. She went on to serve countless women and families in Galeana, Nuevo Leon, where she served as the Hospital Director. Later in 1998, she met her husband, Sergio Gonzalez, and moved to Longview, Texas, where they welcomed their children, Alphalia and Maritza, and blended their family with his children: Devin and Casey. Along with starting her new life in a new country, she began to work at Special Health Resources, where she was a pillar for the Hispanic community in the education and prevention of HIV. Her love of medicine led her to begin volunteering for Refuge International medical missions in Guatemala, where she performed hysterectomies, cesarean sections, and natural deliveries for many years.
After all of this, she began to pursue her second passion: teaching, earning a Master’s Degree in Educational Center Management. Beyond her medical practice, Sandra was a gifted educator who mentored generations of students. Her classroom was a place of inspiration, where she nurtured not only intellect but also character and compassion.
At the heart of her life was her family. A devoted mother to Alphalia and Maritza, she poured her love into every moment spent with those she held dear. Her home was a sanctuary of warmth, compassion, laughter, and faith.
A devout Catholic, Sandra lived her beliefs through action, volunteering in her parish, teaching catholic catechism and faith formation classes for over 20 years. Her faith was her compass, guiding her through life’s joys and trials with humility and strength, and allowing her to offer comfort to those in need.
To the date of her passing, Sandra enjoyed many things. Her busy hands and mind loved to cook, garden, create, care for animals, and bring people together. But above all else, Sandra was an inspiration to everyone around her. She loved to serve all of her communities, follow the Lord our Savior, cherish her friends, and guide her family.
She is survived by her Husband, Sergio, her children Alphalia, Maritza, Devin, and Casey, her sister Adriana, her father Rodolfo, and all the many members of the grand family she built and loved. Her passing is felt as waves of grief throughout our hearts, but we have faith in the Lord, Jesus Christ, and his divine plan.
Dra. Sandra Nohemí González Delgado Muñiz
[21 de Febrero de 1969] – [ 22 de Noviembre de 2025]
Amada madre y esposa, educadora, Gineco-obstetra y Fiel Sierva del Señor
Con profundo amor e inmensa tristeza, anunciamos el fallecimiento de la Dra. Sandra Nohemí González Delgado Muñiz, quien partió de esta vida el Sábado 22 de Noviembre de 2025, a los 56 años. Madre abnegada, médica compasiva, mujer de fe inquebrantable, que deja un legado de sabiduría, servicio y amor incondicional.
Nació el 21 de Febrero de 1969 en Monterrey, Nuevo León, México. Sandra era apasionada por el aprendizaje, su deseo insaciable de aprender solo era igualado por el deseo decompartir su conocimiento. Persiguió su pasión por la medicina con esfuerzo tenaz obteniendo su título de Médico Cirujano Partero con especialidad en Ginecología y Obstetricia en la Universidad Autónoma de Nuevo León, donde estudió de 1987 a 1996. Utilizó su desempeño académico para servir a innumerables mujeres y familias en Galeana, Nuevo León, donde también se desempeñó como Directora del hospital.
En 1998 conoció a su esposo, Sergio González, se trasladó a Longview, Texas, donde Dios les bendijo con la llegada de sus hijas Alphalia y Maritza, uniendo a su familia con los hijos de Sergio: Devin y Casey. Al comenzar su nueva vida en un nuevo país, empezó a trabajar en Special Health Resources, donde se convirtió en un pilar para la comunidad hispana en la educación y prevención del VIH.
Su vocación por la medicina la llevó a ofrecerse como voluntaria en las misiones médicas de Refuge International en Guatemala, donde durante muchos años realizó histerectomías, cesáreas y partos naturales, brindando atención médica con altruismo y humanidad.
Después de esta etapa, decidió seguir su segunda pasión: la docencia. Obtuvo una Maestría en Gestión de Centros Educativos. Sandra fue una educadora excepcional que
formó a generaciones de estudiantes. Su salón de clases era un entorno estimulante, donde la creatividad y el asombro florecían, donde cultivaba no solo el intelecto, sino también el carácter y la compasión.
Su vida giraba en torno al amor por su familia. Como madre entregada a Alphalia y Maritza, llenó cada momento con la ternura de su corazón y amó con intensidad cada momento que compartió con sus seres queridos. Su hogar fue un remanso de compasión, alegría, paz y fe.
Católica devota, Sandra vivió su fe a través de sus acciones. Fue voluntaria en su parroquia donde impartió clases de catecismo y formación en la fe durante más de 20 años. Su fe fue su brújula, guiándola con humildad y fortaleza a través de las alegrías y tribulaciones de la vida; permitiéndole consolar a quienes lo necesitaban.
Hasta el día de su partida, Sandra disfrutó de una abundancia de aficiones. Bendecida con una mente activa y manos laboriosas, Sandra amaba cocinar, cultivar, cuidar animales y reunir a las personas. Indudablemente, Sandra fue una inspiración para todos los que tuvieron la fortuna de conocerla. Su vida fue testimonio de entrega: amó servir a sus comunidades, siguió con fe al Señor nuestro Salvador, honró con lealtad a sus amistades y guió con amor a su familia.
Le sobreviven su esposo Sergio; sus hijos Alphalia, Maritza, Devin y Casey; su hermana Adriana; su padre Rodolfo y todos los miembros de la gran familia que construyó y amó. Su partida deja un profundo vacío en nuestros corazones, pero confiamos en Nuestro Señor Jesucristo y en su plan divino.
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